Nacida en 1946 cerca de Módena, Caterina Caselli debutó como como solista en 1964 con "Ti telefono tutte le sere" pero no pasó absolutamente nada. Un cambio de sello e incluso de color de pelo, se pasa al rubio, le proporciona un poco de notoriedad con "Sono qui con voi" una versión del "Baby please don’t go" de los Them. Su suerte cambiará en el festival de San Remo del 1966 cuando Adriano Celentano decide que a él no le mola "Nessuno mi può giudicare" y se la ofrecen a ella. Aunque no gana, lo hace Domenico Modugno con "Dio come ti amo", la canción resulta un éxito incluso en España. Que recuerde, de "Ninguno me puede juzgar" hicieron versiones los Mustang, Gelu, y creo que los Ángeles Azules antes de convertirse en Los Ángeles. Convertida en estrella mantuvo el tipo con "L’uomo d’oro", " Tutto nero", una versión del "Paint it black","Puoi farmi piangere", (I put a spell on you) o "Sono bugiarda", una nueva versión, en este caso el "I'm a believer". El 68 es año de cambios y como prueba el single que hoy traemos, la fantástica adaptación del "Days of Pearly Spencer" del folk-singer británico David McWilliams, de la que realiza una gran versión, reteniendo todo lo que hacía interesante al tema original. "L'orologio", el tema de la cara B, desgraciadamente no tiene ese mismo espíritu. Después de su matrimonio en 1970 va pensando en la retirada que se produce en el 1975 para dedicarse a otra faceta mucho más empresarial. En este sitio tenéis una buena biografía de ella.
1 comentario:
Toda una curiosidad la versión de David McWilliams. Si señor. Gracias por este pequeño descubrimiento.
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